La princesa Ariane cumplió 18. Sus nuevos compromisos, el detalle de los retratos oficiales y el duro golpe que recibió a los 11 año

Por ser la menor de las tres hijas de los reyes de los Países Bajos, Ariane es la más mimada de Huis ten Bosch, el palacio de La Haya en el que viven, y la menos conocida. Dueña de un perfil bajísimo y hasta el momento con escasa participación en la agenda real, es poco lo que se sabe de ella más allá de que ama los caballos, tocar la guitarra y el piano, dibujar y pintar.
Tal como hicieron con Amalia (21) y Alexia (19), Guillermo Alejandro y Máxima pusieron mucho empeño en que tuviera una vida lo más normal posible. Después de egresar en 2023 del Instituto Christelijk Gymnasium Sorghvliet, Ariane está cursando el Bachillerato Internacional en el United World College of the Adriatic, ubicado en Duino, Italia y, una vez que termine, se especula con cuál será su próximo paso. Por el momento, se habla de que podría tomarse un año sabático para viajar y hacer trabajo de voluntariado, tal como hicieron sus hermanas. Y, una vez que se matricule en alguna universidad, podría congeniar sus estudios con sus primeros actos oficiales en solitario.
REGALOS REALES
Aunque no trascendió específicamente cómo celebró su gran día, sí se sabe que la mayoría de edad le llegó con una serie de distinciones reales: el Rey le concedió la Gran Cruz de la Orden del León de los Países Bajos y la nombró dama de la Orden del jefe de Estado (todos los hijos del jefe del Estado son distinguidos con este título al cumplir 18 años) y ahora podrá usar su propio escudo. Además, la Casa Real compartió cuatro fotografías nuevas tomadas en el salón chino de Huis ten Bosch por Frank Ruiter. En ellas se la ve en su versión más adulta, muy elegante con dos looks de inspiración romántica, perfectamente maquillada, subida a unos stilettos de vértigo y usando algunas alhajas del cofre de Orange Nassau y otras de Máxima. Los retratos, en claroscuro, son parte de una serie que empezó con Amalia, princesa heredera, y siguió con Alexia cuando cumplieron sus 18 años.
Este cumpleaños y la mayoría de edad le traerán mayor exposición a Ariane, que es la tercera en la línea de sucesión al trono. Más allá de participar como siempre en el Día del Rey, la fecha que se celebra el cumpleaños del monarca, y en los posados familiares que hacen al inicio de las vacaciones de verano y para fin de año, el próximo septiembre será parte del Día del Príncipe. Se trata de una cita fundamental en la agenda real y marca el comienzo de manera oficial del calendario político del país mediante el simbólico acto de la apertura del Parlamento. Ese día Ariane acompañará a su familia en el Teatro Real de La Haya y saldrá a saludar desde el balcón del Palacio Noordeinde, junto a sus padres, sus hermanas y sus tíos, el príncipe Constantino y la princesa Laurentien. Además, según publicó el sitio neerlandés Vorsten, en el verano boreal dará su primera conferencia de prensa.
NEERLANDESA Y ARGENTINA, A MUCHA HONRA
Ariane Guillermina Máxima Inés, tal es su nombre completo, nació el 10 de abril de 2007 en el hospital Bronovo, de La Haya. Más allá de elegirle un nombre que empezara con “A”, como hicieron con sus hijas mayores, Sus Majestades quisieron honrar tanto la sangre neerlandesa como la sangre argentina que corre por las venas de Ariane. Incluyeron los nombres de sus respectivas bisabuelas, la reina Guillermina y Máxima Blanca Bonorino, y el de la hermana menor de la Reina, Inés Zorreguieta, con quien la monarca tenía un vínculo especialísimo a pesar de los trece años de diferencia que le llevaba. Incluso, la eligió como madrina de bautismo, un honor que compartió con el príncipe Guillermo de Luxemburgo, Baron Tijo Collot d’Escury, Antoine Frilling y con Valeria Delger, compañera de Máxima en el colegio Northlands.
CRECER DE GOLPE
Con apenas 11 años, Ariane vivió una de las experiencias más demoledoras y dolorosas de su vida: el 7 de junio de 2018, su querida madrina, Inés Zorreguieta, fue encontrada muerta en su departamento de Caballito y la policía habló de suicidio. La noticia, devastadora, hizo que Máxima, Guillermo Alejandro y las tres princesas volaran de inmediato a Argentina para despedir sus restos y acompañar a su madre, María del Carmen.
Tiempo después, en mayo de 2021, con valentía y el corazón partido, Máxima declaró: “Sabíamos que ella no estaba bien desde hacía tiempo, en los últimos ocho o nueve años. Y aun así seguía existiendo un tabú entre nosotros, no hablábamos de ello. No conocíamos exactamente cuál era su diagnóstico. No sabíamos realmente cómo ayudarla”.
Durante una entrevista con Matthijs van Nieuwkerk para la Televisión Nacional de Holanda, agregó: “Ella tenía una depresión, un desorden de la personalidad. Hicimos lo mejor que pudimos para ayudarla y apoyarla, pero la realidad es que no somos profesionales. Estuvo internada varias veces, pero pensás que no sabés si es lo mejor para ella. Creo que hay mucho que hacer todavía en el tema de la salud mental”. Desde entonces, la salud mental es una de los tantas causas que abraza.
LA SALUD DE ARIANE
A pesar de ser una férrea defensora de la intimidad de su familia, en febrero pasado, y en plan de concientizar sobre las consecuencias que puede generar la alta exposición a las pantallas, Máxima participó en la conferencia Clicks & Issues: Young and Online que organizaron Unicef Países Bajos, la fundación MIND Us y la ciudad de Ámsterdam en el marco del Día de Internet Segura y reveló que Ariane tiene problemas de visión debido al “tiempo que pasa frente a la pantalla”.
Según se supo, la princesa tiene problemas para enfocar los ojos, algo que le puede causar desde fatiga ocular hasta dolores de cabeza y molestias al leer.
Esta no es la primera vez que la salud de Ariane preocupa a su familia. Cuando tenía menos de un mes la internaron por una afección respiratoria que la mantuvo en neonatología una semana. Y meses más tarde se repitió el cuadro, pero de este lado del Atlántico, mientras estaba de visita en Argentina.
Por ser la menor de las tres hijas de los reyes de los Países Bajos, Ariane es la más mimada de Huis ten Bosch, el palacio de La Haya en el que viven, y la menos conocida. Dueña de un perfil bajísimo y hasta el momento con escasa participación en la agenda real, es poco lo que se sabe de ella más allá de que ama los caballos, tocar la guitarra y el piano, dibujar y pintar.
Tal como hicieron con Amalia (21) y Alexia (19), Guillermo Alejandro y Máxima pusieron mucho empeño en que tuviera una vida lo más normal posible. Después de egresar en 2023 del Instituto Christelijk Gymnasium Sorghvliet, Ariane está cursando el Bachillerato Internacional en el United World College of the Adriatic, ubicado en Duino, Italia y, una vez que termine, se especula con cuál será su próximo paso. Por el momento, se habla de que podría tomarse un año sabático para viajar y hacer trabajo de voluntariado, tal como hicieron sus hermanas. Y, una vez que se matricule en alguna universidad, podría congeniar sus estudios con sus primeros actos oficiales en solitario.
REGALOS REALES
Aunque no trascendió específicamente cómo celebró su gran día, sí se sabe que la mayoría de edad le llegó con una serie de distinciones reales: el Rey le concedió la Gran Cruz de la Orden del León de los Países Bajos y la nombró dama de la Orden del jefe de Estado (todos los hijos del jefe del Estado son distinguidos con este título al cumplir 18 años) y ahora podrá usar su propio escudo. Además, la Casa Real compartió cuatro fotografías nuevas tomadas en el salón chino de Huis ten Bosch por Frank Ruiter. En ellas se la ve en su versión más adulta, muy elegante con dos looks de inspiración romántica, perfectamente maquillada, subida a unos stilettos de vértigo y usando algunas alhajas del cofre de Orange Nassau y otras de Máxima. Los retratos, en claroscuro, son parte de una serie que empezó con Amalia, princesa heredera, y siguió con Alexia cuando cumplieron sus 18 años.
Este cumpleaños y la mayoría de edad le traerán mayor exposición a Ariane, que es la tercera en la línea de sucesión al trono. Más allá de participar como siempre en el Día del Rey, la fecha que se celebra el cumpleaños del monarca, y en los posados familiares que hacen al inicio de las vacaciones de verano y para fin de año, el próximo septiembre será parte del Día del Príncipe. Se trata de una cita fundamental en la agenda real y marca el comienzo de manera oficial del calendario político del país mediante el simbólico acto de la apertura del Parlamento. Ese día Ariane acompañará a su familia en el Teatro Real de La Haya y saldrá a saludar desde el balcón del Palacio Noordeinde, junto a sus padres, sus hermanas y sus tíos, el príncipe Constantino y la princesa Laurentien. Además, según publicó el sitio neerlandés Vorsten, en el verano boreal dará su primera conferencia de prensa.
NEERLANDESA Y ARGENTINA, A MUCHA HONRA
Ariane Guillermina Máxima Inés, tal es su nombre completo, nació el 10 de abril de 2007 en el hospital Bronovo, de La Haya. Más allá de elegirle un nombre que empezara con “A”, como hicieron con sus hijas mayores, Sus Majestades quisieron honrar tanto la sangre neerlandesa como la sangre argentina que corre por las venas de Ariane. Incluyeron los nombres de sus respectivas bisabuelas, la reina Guillermina y Máxima Blanca Bonorino, y el de la hermana menor de la Reina, Inés Zorreguieta, con quien la monarca tenía un vínculo especialísimo a pesar de los trece años de diferencia que le llevaba. Incluso, la eligió como madrina de bautismo, un honor que compartió con el príncipe Guillermo de Luxemburgo, Baron Tijo Collot d’Escury, Antoine Frilling y con Valeria Delger, compañera de Máxima en el colegio Northlands.
CRECER DE GOLPE
Con apenas 11 años, Ariane vivió una de las experiencias más demoledoras y dolorosas de su vida: el 7 de junio de 2018, su querida madrina, Inés Zorreguieta, fue encontrada muerta en su departamento de Caballito y la policía habló de suicidio. La noticia, devastadora, hizo que Máxima, Guillermo Alejandro y las tres princesas volaran de inmediato a Argentina para despedir sus restos y acompañar a su madre, María del Carmen.
Tiempo después, en mayo de 2021, con valentía y el corazón partido, Máxima declaró: “Sabíamos que ella no estaba bien desde hacía tiempo, en los últimos ocho o nueve años. Y aun así seguía existiendo un tabú entre nosotros, no hablábamos de ello. No conocíamos exactamente cuál era su diagnóstico. No sabíamos realmente cómo ayudarla”.
Durante una entrevista con Matthijs van Nieuwkerk para la Televisión Nacional de Holanda, agregó: “Ella tenía una depresión, un desorden de la personalidad. Hicimos lo mejor que pudimos para ayudarla y apoyarla, pero la realidad es que no somos profesionales. Estuvo internada varias veces, pero pensás que no sabés si es lo mejor para ella. Creo que hay mucho que hacer todavía en el tema de la salud mental”. Desde entonces, la salud mental es una de los tantas causas que abraza.
LA SALUD DE ARIANE
A pesar de ser una férrea defensora de la intimidad de su familia, en febrero pasado, y en plan de concientizar sobre las consecuencias que puede generar la alta exposición a las pantallas, Máxima participó en la conferencia Clicks & Issues: Young and Online que organizaron Unicef Países Bajos, la fundación MIND Us y la ciudad de Ámsterdam en el marco del Día de Internet Segura y reveló que Ariane tiene problemas de visión debido al “tiempo que pasa frente a la pantalla”.
Según se supo, la princesa tiene problemas para enfocar los ojos, algo que le puede causar desde fatiga ocular hasta dolores de cabeza y molestias al leer.
Esta no es la primera vez que la salud de Ariane preocupa a su familia. Cuando tenía menos de un mes la internaron por una afección respiratoria que la mantuvo en neonatología una semana. Y meses más tarde se repitió el cuadro, pero de este lado del Atlántico, mientras estaba de visita en Argentina.
Ya no quedan chiquitas en palacio y, desde
este año, la tercera hija de Máxima y Guillermo Alejandro tendrá mayor participación en algunos actos oficiales LA NACION