
Fueron días de muchas actividades para Máxima Zorreguieta. Tras celebrar su cumpleaños número 54, el domingo, dijo presente en la Ciudad del Vaticano para asistir la ceremonia de asunción del Papa León XIV en compañía del Primer Ministro de los Países Bajos, Dick Schoof. Cabe recordar que ni ella ni el rey Guillermo Alejandro asistieron al funeral del Papa Francisco debido a que ese mismo día en su país celebraban el Día del Rey. El lunes, la monarca aterrizó en Sudáfrica para cumplir con una serie de compromisos como representante de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Fiel a su estilo, se mostró descontracturada y relajada y no dudó sumarse a un grupo de artistas para bailar con ellos.
El lunes 19 de mayo, la reina consorte de los Países Bajos llegó a Ciudad del Cabo en calidad de Defensora Especial del Secretario General de las Naciones Unidas para la Salud Financiera (UNSGSA). Es el primer viaje oficial que realiza a Sudáfrica con este nuevo cargo, el cual asumió en septiembre. Previamente, fue Defensora Especial del Secretario General de las Naciones Unidas para la Financiación Inclusiva para el Desarrollo, rol que ocupó durante 15 años. Su visita se extenderá hasta el jueves 22 e incluirá compromisos también en Johannesburgo.
Su primer día de actividades en Ciudad del Cabo incluyó visitas a tres empresas que contribuyen a la salud financiera. Tuvo un importante recibimiento con un show musical en el que los artistas locales realizaron algunos de sus clásicos cantos y bailes. Como de costumbre, ella decidió no ser una mera espectadora y se sumó a realizar la coreografía. Con su sonrisa característica, siguió los pasos y volvió a demostrar su talento para el baile. Cabe mencionar que en varias oportunidades se animó a bailar en público, ya sea en la calle, en un escenario o durante un evento deportivo.
Máxima Zorreguieta en Sudáfrica
Para su primer compromiso en Sudáfrica, Zorreguieta eligió un outfit formal pero colorido. Optó por un conjunto de blazer y pantalón de vestir color celeste de Dries Van Noten, que ya utilizó en otras oportunidades. Debajo llevó una camisa estampada en blanco y azul. Sumó una cartera de Marni y un par de sus clásicos stilettos de Gianvito Rossi además de un trench marrón que la ayudó a protegerse de la lluvia. Al cabello lo llevó recogido en una colita baja que dejó al descubierto sus coloridos pendientes con gemas rosas, azules, moradas y amarillas.
Este no fue el único momento artístico que protagonizó Máxima Zorreguieta este año. En febrero, cuando estuvo en Emmen para visitar las escuelas primarias Sint Fransschool y OBS Emmermeer, las cuales ofrecen actividades artísticas extracurriculares apadrinadas por la fundación Más Música en el Aula, de la cual es presidenta honoraria, se animó a bailar bajo la nieve.
La reina Máxima volvió a salirse del protocolo y participó de un show musical
Se sumó a la performance que un grupo de niños hizo al aire libre con tachos amarillos y palitos de colores para homenajearla. Además de bailar, sujetó uno de los tachos para que una de las niñas pudiera hacer música. Luego se alejó para apreciar el número desde lejos y, entre gritos, aplausos y los copos de nieve que caían, fue la encargada de cerrar el show y cuando la cuenta regresiva llegó a su fin, tocó el gong.
Fueron días de muchas actividades para Máxima Zorreguieta. Tras celebrar su cumpleaños número 54, el domingo, dijo presente en la Ciudad del Vaticano para asistir la ceremonia de asunción del Papa León XIV en compañía del Primer Ministro de los Países Bajos, Dick Schoof. Cabe recordar que ni ella ni el rey Guillermo Alejandro asistieron al funeral del Papa Francisco debido a que ese mismo día en su país celebraban el Día del Rey. El lunes, la monarca aterrizó en Sudáfrica para cumplir con una serie de compromisos como representante de la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Fiel a su estilo, se mostró descontracturada y relajada y no dudó sumarse a un grupo de artistas para bailar con ellos.
El lunes 19 de mayo, la reina consorte de los Países Bajos llegó a Ciudad del Cabo en calidad de Defensora Especial del Secretario General de las Naciones Unidas para la Salud Financiera (UNSGSA). Es el primer viaje oficial que realiza a Sudáfrica con este nuevo cargo, el cual asumió en septiembre. Previamente, fue Defensora Especial del Secretario General de las Naciones Unidas para la Financiación Inclusiva para el Desarrollo, rol que ocupó durante 15 años. Su visita se extenderá hasta el jueves 22 e incluirá compromisos también en Johannesburgo.
Su primer día de actividades en Ciudad del Cabo incluyó visitas a tres empresas que contribuyen a la salud financiera. Tuvo un importante recibimiento con un show musical en el que los artistas locales realizaron algunos de sus clásicos cantos y bailes. Como de costumbre, ella decidió no ser una mera espectadora y se sumó a realizar la coreografía. Con su sonrisa característica, siguió los pasos y volvió a demostrar su talento para el baile. Cabe mencionar que en varias oportunidades se animó a bailar en público, ya sea en la calle, en un escenario o durante un evento deportivo.
Máxima Zorreguieta en Sudáfrica
Para su primer compromiso en Sudáfrica, Zorreguieta eligió un outfit formal pero colorido. Optó por un conjunto de blazer y pantalón de vestir color celeste de Dries Van Noten, que ya utilizó en otras oportunidades. Debajo llevó una camisa estampada en blanco y azul. Sumó una cartera de Marni y un par de sus clásicos stilettos de Gianvito Rossi además de un trench marrón que la ayudó a protegerse de la lluvia. Al cabello lo llevó recogido en una colita baja que dejó al descubierto sus coloridos pendientes con gemas rosas, azules, moradas y amarillas.
Este no fue el único momento artístico que protagonizó Máxima Zorreguieta este año. En febrero, cuando estuvo en Emmen para visitar las escuelas primarias Sint Fransschool y OBS Emmermeer, las cuales ofrecen actividades artísticas extracurriculares apadrinadas por la fundación Más Música en el Aula, de la cual es presidenta honoraria, se animó a bailar bajo la nieve.
La reina Máxima volvió a salirse del protocolo y participó de un show musical
Se sumó a la performance que un grupo de niños hizo al aire libre con tachos amarillos y palitos de colores para homenajearla. Además de bailar, sujetó uno de los tachos para que una de las niñas pudiera hacer música. Luego se alejó para apreciar el número desde lejos y, entre gritos, aplausos y los copos de nieve que caían, fue la encargada de cerrar el show y cuando la cuenta regresiva llegó a su fin, tocó el gong.
La reina de los Países Bajos llegó al país africano en su rol de representante de la ONU; comenzó su estadía en Ciudad del Cabo y con un memorable momento artístico LA NACION