Un senador radical defendió a Victoria Villarruel tras la polémica sesión: “Ella cumplió con su obligación”

El senador nacional Pablo Blanco, representante radical por Tierra del Fuego, respaldó el rol de la vicepresidenta Victoria Villarruel en la sesión del Senado que provocó un conflicto dentro del oficialismo. En declaraciones a LN+, Blanco aseguró que la sesión fue convocada de manera ordinaria y reglamentaria. Las declaraciones se produjeron en el marco de la interna política tras la aprobación de leyes que el Gobierno considera contrarias a su política fiscal.
El legislador señaló que la responsabilidad de los resultados de esa sesión son “exclusiva responsabilidad” del presidente del bloque de La Libertad Avanza, Ezequiel Atauche, y de quienes le dan las ordenes desde la Casa Rosada. “Como se dieron cuenta que se equivocaron, ahora quieren echarle toda la culpa a la presidenta de la Cámara siendo que ella cumplió con su obligación”, planteó.
Por otra parte, acusó al jefe de Gabinete, Guillermo Francos, de hacer afirmaciones infundadas sobre la legalidad del proceso legislativo. Según explicó, la sesión fue habilitada conforme a lo establecido en la sesión preparatoria y en el reglamento del cuerpo. En ese marco, subrayó que Villarruel simplemente cumplió con su función institucional.
El senador fue enfático al defender el accionar de la vicepresidenta frente a las críticas que surgieron desde el propio oficialismo, que la acusó de haber habilitado una sesión supuestamente ilegal. Para Blanco, esa acusación demuestra un desconocimiento del reglamento del Senado y constituye un intento de desviar la atención sobre errores cometidos por el bloque gobernante.
“Están denostando a una persona con la cual no coincido pero que, por cumplir con su función institucional, la están tratando de traidora. Hizo lo que tenía que hacer”, dijo. Y siguió: “Hoy lo escuché al jefe de gabinete decir barbaridades, decir que es ilegal la sesión, que había dos proyectos de los gobernadores que se cuestionaron por no tener dictamen. No saben lo que hablan y, con tal de justificar su postura, dicen cualquier cosa”.
Durante la entrevista, el legislador por Tierra del Fuego también se refirió al futuro de los proyectos aprobados en esa sesión, entre ellos la emergencia en discapacidad y el aumento para las jubilaciones. Explicó que ahora deben ser enviados al Poder Ejecutivo, que podrá ejercer su facultad constitucional de vetarlos. Si eso ocurre, los proyectos volverán a la Cámara de Diputados, donde una mayoría podrá insistir con su sanción. En caso de que se rechace el veto en Diputados, los textos volverán al Senado, donde, según Blanco, “no hay duda” de que habrá votos suficiente para ratificarlos.
En su análisis del conflicto interno, Blanco consideró que el malestar entre el presidente Javier Milei y la vicepresidenta no se originó en esa sesión legislativa sino que viene de situaciones previas. En ese marco, mencionó como ejemplos las actitudes del presidente en el Tedeum del 25 de mayo, en el cual no saludó a Villarruel, y durante la apertura de sesiones ordinarias, momento en el que, según describió la “la saludó porque prácticamente no le quedaba otra”. Según sostuvo, esas señales previas dan cuenta de una tensión preexistente que el Gobierno intenta ahora canalizar a través de la discusión sobre la sesión del jueves pasado.
“Se están ensañando con una persona que cumplió con su rol institucional”, insistió el senador. Y agregó que “el Congreso funcionó como establece la Constitución y el reglamento”. Blanco también señaló que hay periodistas que, según su visión, están alimentando artificialmente una narrativa de enfrentamiento entre Milei y Villarruel sin atender al detalle técnico del funcionamiento legislativo.
El senador nacional Pablo Blanco, representante radical por Tierra del Fuego, respaldó el rol de la vicepresidenta Victoria Villarruel en la sesión del Senado que provocó un conflicto dentro del oficialismo. En declaraciones a LN+, Blanco aseguró que la sesión fue convocada de manera ordinaria y reglamentaria. Las declaraciones se produjeron en el marco de la interna política tras la aprobación de leyes que el Gobierno considera contrarias a su política fiscal.
El legislador señaló que la responsabilidad de los resultados de esa sesión son “exclusiva responsabilidad” del presidente del bloque de La Libertad Avanza, Ezequiel Atauche, y de quienes le dan las ordenes desde la Casa Rosada. “Como se dieron cuenta que se equivocaron, ahora quieren echarle toda la culpa a la presidenta de la Cámara siendo que ella cumplió con su obligación”, planteó.
Por otra parte, acusó al jefe de Gabinete, Guillermo Francos, de hacer afirmaciones infundadas sobre la legalidad del proceso legislativo. Según explicó, la sesión fue habilitada conforme a lo establecido en la sesión preparatoria y en el reglamento del cuerpo. En ese marco, subrayó que Villarruel simplemente cumplió con su función institucional.
El senador fue enfático al defender el accionar de la vicepresidenta frente a las críticas que surgieron desde el propio oficialismo, que la acusó de haber habilitado una sesión supuestamente ilegal. Para Blanco, esa acusación demuestra un desconocimiento del reglamento del Senado y constituye un intento de desviar la atención sobre errores cometidos por el bloque gobernante.
“Están denostando a una persona con la cual no coincido pero que, por cumplir con su función institucional, la están tratando de traidora. Hizo lo que tenía que hacer”, dijo. Y siguió: “Hoy lo escuché al jefe de gabinete decir barbaridades, decir que es ilegal la sesión, que había dos proyectos de los gobernadores que se cuestionaron por no tener dictamen. No saben lo que hablan y, con tal de justificar su postura, dicen cualquier cosa”.
Durante la entrevista, el legislador por Tierra del Fuego también se refirió al futuro de los proyectos aprobados en esa sesión, entre ellos la emergencia en discapacidad y el aumento para las jubilaciones. Explicó que ahora deben ser enviados al Poder Ejecutivo, que podrá ejercer su facultad constitucional de vetarlos. Si eso ocurre, los proyectos volverán a la Cámara de Diputados, donde una mayoría podrá insistir con su sanción. En caso de que se rechace el veto en Diputados, los textos volverán al Senado, donde, según Blanco, “no hay duda” de que habrá votos suficiente para ratificarlos.
En su análisis del conflicto interno, Blanco consideró que el malestar entre el presidente Javier Milei y la vicepresidenta no se originó en esa sesión legislativa sino que viene de situaciones previas. En ese marco, mencionó como ejemplos las actitudes del presidente en el Tedeum del 25 de mayo, en el cual no saludó a Villarruel, y durante la apertura de sesiones ordinarias, momento en el que, según describió la “la saludó porque prácticamente no le quedaba otra”. Según sostuvo, esas señales previas dan cuenta de una tensión preexistente que el Gobierno intenta ahora canalizar a través de la discusión sobre la sesión del jueves pasado.
“Se están ensañando con una persona que cumplió con su rol institucional”, insistió el senador. Y agregó que “el Congreso funcionó como establece la Constitución y el reglamento”. Blanco también señaló que hay periodistas que, según su visión, están alimentando artificialmente una narrativa de enfrentamiento entre Milei y Villarruel sin atender al detalle técnico del funcionamiento legislativo.
Pablo Blanco cuestionó al oficialismo por acusar a la vicepresidenta y afirmó que la asamblea legislativa fue reglamentaria LA NACION