PÉREZ SE ALEJA DEL PERONISMO Y SE ALÍA CON CHISPITA FADUL EN UN FRENTE CON GUIÑOS A LA DERECHA

Mientras el espacio nacional Fuerza Patria, conducido por Cristina Fernández de Kirchner, convoca a un alineamiento del peronismo con eje en la unidad, el intendente de Río Grande, Martín Pérez, decidió avanzar en sentido contrario: formalizó una alianza electoral con la dirigente de derecha Liliana “Chispita” Fadul, referente de Somos Fueguinos. El acuerdo, que se consolidará de cara a las elecciones legislativas de octubre, implica un alejamiento explícito del Partido Justicialista —que tiene como presidenta nacional a CFK y como titular en Tierra del Fuego al intendente de Ushuaia, Walter Vuoto—, y abre una nueva etapa política en la que Pérez rompe con el kirchnerismo, espacio desde el que forjó su carrera como diputado nacional y como jefe comunal. La alianza entre el partido Provincia Grande, recientemente lanzado por Pérez, y el histórico espacio conservador Somos Fueguinos, apunta a conformar un frente “fueguinista” que combine una teórica defensa del subrégimen industrial con críticas a la dirigencia local, guiños a la agenda de austeridad de Milei, y posiciones conservadoras en materia cultural y social. El giro político de Pérez coincide con su distanciamiento público de Vuoto y de la conducción tradicional del PJ fueguino. Por su parte, Fadul —quien se expresó en contra de políticas como el nombre de la “Casa de la Mujer” y ha reivindicado discursos de orden y recorte estatal— encarna una vertiente abiertamente crítica del kirchnerismo y de los partidos nacionales. Además, la alineación de Somos Fueguinos con el oficialismo libertario es total: su vicepresidente, el diputado Ricardo Garramuño, quien asumió la banca tras el fallecimiento de Héctor “Tito” Stefani, ha votado todos los proyectos clave del gobierno de Javier Milei en el Congreso. Su voto ha sido decisivo para la aprobación de distintas iniciativas libertarias. Lejos de Fuerza Patria, y con un armado fragmentario, Pérez busca consolidarse como figura de proyección desde una agenda autónoma, individualista y conservadora, desmarcándose del peronismo tradicional y abrazando un nuevo eje político que rompe con la historia reciente del justicialismo fueguino.