Misterio en Coghlan: un compañero de escuela del chico enterrado al lado de donde vivió Gustavo Cerati quedó bajo sospecha

Diego Fernández Lima fue visto por última vez el 26 de julio de 1984. Tenía 16 años. Estudiaba y jugaba al fútbol en Excursionistas. Había salido de su casa para ir a la casa de un amigo. En mayo pasado, casi 41 años después de su desaparición, de casualidad, sus restos óseos fueron encontrados en el fondo de una casa de Coghlan, al lado del chalet donde, a principios de este siglo, vivió el líder de Soda Stereo, Gustavo Cerati. El asesinato del adolescente había permanecido oculto. Ahora, el misterioso crimen tiene un sospechoso: un compañero de estudios de la víctima, cuya familia, de apellido Graf, todavía vive en la casa donde fueron encontrados los huesos.
La conexión entre víctima y sospechoso fue aportada por un compañero de escuela de ambos, que en la actualidad vive en Europa, y que se comunicó con el fiscal Martín López Perrando, funcionario a cargo de la investigación, después de leer la noticia periodística de que los restos óseos hallados en Coghlan eran de Fernández Lima.
El Club Atlético Excursionistas expresa su estupor y tristeza por las noticias acerca de Diego Fernández Lima, quien fuera futbolista de nuestra institución al momento de su desaparición. Enviamos nuestras condolencias y un fuerte abrazo a toda su familia y deseamos que su alma… pic.twitter.com/DTIRJnd5dM
— Club Atlético Excursionistas 🇳🇬 (@ExcursioOficial) August 6, 2025
Así lo informaron a LA NACION calificadas fuentes judiciales. Hoy, por Zoom, el fiscal López Perrando le tomará declaración testimonial al compañero de Fernández Lima y a el sospechoso.
“Está claro que Fernández Lima fue asesinado. No sabemos si solo hubo un asesino. La intención, a partir de que ahora sabemos que en la casa donde fue enterrado el cuerpo vivió y aún viven integrantes de la familia Graf es reconstruir lo que pasó hace 41 años”, dijeron las fuentes judiciales.
La desaparición de Fernández Lima comenzó a resolverse de casualidad. Parte del cadáver fue hallado el 20 de mayo pasado cuando albañiles trabajaban en la construcción de un edificio en un lote situado en Congreso al 3700, en lo que había sido la casa donde vivió Cerati.
“Personal de la Comisaría Vecinal 12C fue alertado desde el número de emergencias 911 sobre el hallazgo de restos óseos humanos, posiblemente de vieja data, en una obra en construcción situada en Congreso al 3700. Al arribar, los agentes se entrevistaron con el arquitecto a cargo del proyecto, quien refirió que mientras los obreros se encontraban realizando tareas de excavación sobre la medianera, en un momento dado se desprendió un trozo de tierra de la casa lindera y quedaron a la vista restos óseos humanos que aparentaban ser antiguos”, informaron oportunamente fuentes de la Policía de la Ciudad.
Hace cuatro décadas, los fondos de las propiedades –la casa donde vivió Cerati y el inmueble contiguo– solo estaban divididos por una ligustrina. Si bien los restos óseos fueron hallados cuando los albañiles trabajaban en lo que había sido el lugar donde vivió el músico y líder de Soda Stereo, los investigadores creen que los huesos habían sido enterrados en el lote vecino.
Tras el hallazgo de los restos óseos se inició una investigación que quedó a cargo del fiscal López Perrando, que contó con la colaboración del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) para el exhaustivo análisis de los restos y el minucioso proceso que confluyó en la identificación de la víctima.
A finales de junio pasado, los especialistas del EAAF le elevaron un informe al fiscal López Perrando. Los peritos habían logrado determinar que los huesos correspondían a una persona de sexo masculino de entre 16 y 19 años que había sufrido una muerte violenta.
“Se trató de una muerte violenta, sin dudas. No se sabe si la puñalada provocó la muerte, pero sí con certeza sabemos que el muchacho fue apuñalado. La herida cortopunzante estaba a la altura de la cuarta costilla, como por detrás del brazo. También hay signos de que se intentó desmembrar el cuerpo”, explicó en su momento a LA NACION una fuente judicial.
Se trataba de un NN. Faltaba identificarlo. Si bien el fiscal López Perrando puede pedir citar a prestar declaración indagatoria al sospechoso, por el tiempo transcurrido, el crimen prescribió.
“La policía dice que tiene 3000 casos iguales. Y fíjese qué absurdo: desde el primer momento lo caratularon ‘fuga de hogar’. Yo protesté y ¿sabe qué me dijeron? Que así estaban impresos los formularios. Me negué a eso, pero fue como si nada. ¿Qué quiere que investiguen si ya dan por sentado que él se fue, no me que me lo robaron“, había dicho Juan Benigno, el padre de Diego, a la revista Esto!, editada por Crónica, cuando su hijo llevaba dos años desaparecido.
La tarde de la desaparición, después de volver de clases y de almorzar, Diego le pidió dinero a su padre para pagar el colectivo e ir a la casa de un amigo. El adolescente era jugador de las divisiones juveniles de Excursionistas. Así lo señaló el club de Belgrano en un comunicado de prensa al conocerse la identificación de la víctima: “El Club Atlético Excursionistas expresa su estupor y tristeza por las noticias acerca de Diego Fernández Lima, quien fuera futbolista de nuestra institución al momento de su desaparición. Enviamos nuestras condolencias y un fuerte abrazo a toda su familia y deseamos que su alma finalmente pueda descansar en paz”.
Diego Fernández Lima fue visto por última vez el 26 de julio de 1984. Tenía 16 años. Estudiaba y jugaba al fútbol en Excursionistas. Había salido de su casa para ir a la casa de un amigo. En mayo pasado, casi 41 años después de su desaparición, de casualidad, sus restos óseos fueron encontrados en el fondo de una casa de Coghlan, al lado del chalet donde, a principios de este siglo, vivió el líder de Soda Stereo, Gustavo Cerati. El asesinato del adolescente había permanecido oculto. Ahora, el misterioso crimen tiene un sospechoso: un compañero de estudios de la víctima, cuya familia, de apellido Graf, todavía vive en la casa donde fueron encontrados los huesos.
La conexión entre víctima y sospechoso fue aportada por un compañero de escuela de ambos, que en la actualidad vive en Europa, y que se comunicó con el fiscal Martín López Perrando, funcionario a cargo de la investigación, después de leer la noticia periodística de que los restos óseos hallados en Coghlan eran de Fernández Lima.
El Club Atlético Excursionistas expresa su estupor y tristeza por las noticias acerca de Diego Fernández Lima, quien fuera futbolista de nuestra institución al momento de su desaparición. Enviamos nuestras condolencias y un fuerte abrazo a toda su familia y deseamos que su alma… pic.twitter.com/DTIRJnd5dM
— Club Atlético Excursionistas 🇳🇬 (@ExcursioOficial) August 6, 2025
Así lo informaron a LA NACION calificadas fuentes judiciales. Hoy, por Zoom, el fiscal López Perrando le tomará declaración testimonial al compañero de Fernández Lima y a el sospechoso.
“Está claro que Fernández Lima fue asesinado. No sabemos si solo hubo un asesino. La intención, a partir de que ahora sabemos que en la casa donde fue enterrado el cuerpo vivió y aún viven integrantes de la familia Graf es reconstruir lo que pasó hace 41 años”, dijeron las fuentes judiciales.
La desaparición de Fernández Lima comenzó a resolverse de casualidad. Parte del cadáver fue hallado el 20 de mayo pasado cuando albañiles trabajaban en la construcción de un edificio en un lote situado en Congreso al 3700, en lo que había sido la casa donde vivió Cerati.
“Personal de la Comisaría Vecinal 12C fue alertado desde el número de emergencias 911 sobre el hallazgo de restos óseos humanos, posiblemente de vieja data, en una obra en construcción situada en Congreso al 3700. Al arribar, los agentes se entrevistaron con el arquitecto a cargo del proyecto, quien refirió que mientras los obreros se encontraban realizando tareas de excavación sobre la medianera, en un momento dado se desprendió un trozo de tierra de la casa lindera y quedaron a la vista restos óseos humanos que aparentaban ser antiguos”, informaron oportunamente fuentes de la Policía de la Ciudad.
Hace cuatro décadas, los fondos de las propiedades –la casa donde vivió Cerati y el inmueble contiguo– solo estaban divididos por una ligustrina. Si bien los restos óseos fueron hallados cuando los albañiles trabajaban en lo que había sido el lugar donde vivió el músico y líder de Soda Stereo, los investigadores creen que los huesos habían sido enterrados en el lote vecino.
Tras el hallazgo de los restos óseos se inició una investigación que quedó a cargo del fiscal López Perrando, que contó con la colaboración del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) para el exhaustivo análisis de los restos y el minucioso proceso que confluyó en la identificación de la víctima.
A finales de junio pasado, los especialistas del EAAF le elevaron un informe al fiscal López Perrando. Los peritos habían logrado determinar que los huesos correspondían a una persona de sexo masculino de entre 16 y 19 años que había sufrido una muerte violenta.
“Se trató de una muerte violenta, sin dudas. No se sabe si la puñalada provocó la muerte, pero sí con certeza sabemos que el muchacho fue apuñalado. La herida cortopunzante estaba a la altura de la cuarta costilla, como por detrás del brazo. También hay signos de que se intentó desmembrar el cuerpo”, explicó en su momento a LA NACION una fuente judicial.
Se trataba de un NN. Faltaba identificarlo. Si bien el fiscal López Perrando puede pedir citar a prestar declaración indagatoria al sospechoso, por el tiempo transcurrido, el crimen prescribió.
“La policía dice que tiene 3000 casos iguales. Y fíjese qué absurdo: desde el primer momento lo caratularon ‘fuga de hogar’. Yo protesté y ¿sabe qué me dijeron? Que así estaban impresos los formularios. Me negué a eso, pero fue como si nada. ¿Qué quiere que investiguen si ya dan por sentado que él se fue, no me que me lo robaron“, había dicho Juan Benigno, el padre de Diego, a la revista Esto!, editada por Crónica, cuando su hijo llevaba dos años desaparecido.
La tarde de la desaparición, después de volver de clases y de almorzar, Diego le pidió dinero a su padre para pagar el colectivo e ir a la casa de un amigo. El adolescente era jugador de las divisiones juveniles de Excursionistas. Así lo señaló el club de Belgrano en un comunicado de prensa al conocerse la identificación de la víctima: “El Club Atlético Excursionistas expresa su estupor y tristeza por las noticias acerca de Diego Fernández Lima, quien fuera futbolista de nuestra institución al momento de su desaparición. Enviamos nuestras condolencias y un fuerte abrazo a toda su familia y deseamos que su alma finalmente pueda descansar en paz”.
El fiscal Martín López Perrando avanza en la investigación del homicidio de Diego Fernández Lima LA NACION