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lunes, abril 28, 2025
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Cuáles son los autos más rápidos del mundo que pisan la obsesión por los 500 km/h

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Existe un rincón exclusivo de la industria automotriz destinado para los vehículos que parecen salidos directamente de una pista de carreras. Modelos poco prácticos para la vida cotidiana y que llegan a ofrecer algo distinto a lo que el consumidor habitual está acostumbrado.

No son soluciones de movilidad o para el confort, sino que buscan ser una experiencia en sí mismos. Se trata de deportivos extremos que pueden superar los 400 km/h y, en algunos casos, se acercan a los 500 km/h. Pura ingeniería de precisión, potencia y diseño, reservados para algunas pocas billeteras en el mundo.

Desde hace décadas, los fabricantes de estos superdeportivos compiten por alcanzar un objetivo común: ser los más rápidos del planeta. Lejos de la gran mayoría de las rutas convencionales, por donde no pueden circular como consecuencia de sus disposiciones técnicas, estos modelos representan un símbolo de estatus y la simple oportunidad de encenderlos ya se trata de una vivencia particular.

Aunque su velocidad máxima rara vez se alcanza fuera de un circuito, el dato no deja de ser un argumento central para posicionarlos en la cima del mercado. En los últimos años, la evolución tecnológica ha permitido romper marcas históricas: hoy, superar los 400 km/h ya no es una rareza. La nueva frontera parece estar en los 500 km/h, una cifra impensada hace apenas una década. A continuación, un recorrido por los 20 autos más veloces del mundo, según el medio especializado Car and Driver:

Puesto 20: McLaren P1 (350 km/h)

Tras el legendario McLaren F1, la casa de Woking (Inglaterra) no había vuelto a incursionar en un modelo tan ambicioso. Presentado en 2013, está equipado con un sistema híbrido compuesto por un motor V8 biturbo de 3.8 litros y una unidad eléctrica, que entrega una potencia combinada de 916 CV y 900 Nm de par.

Todo ello en una carrocería de apenas 1395 kilos gracias al uso intensivo de fibra de carbono. Incorpora, además, tecnologías heredadas de la Fórmula 1, como el sistema KERS para liberar potencia adicional y un alerón trasero con función DRS. Su velocidad máxima, limitada electrónicamente, alcanza los 350 km/h.

Puesto 19: LaFerrari (350 km/h)

El primer híbrido en la historia de Maranello fue también uno de los Ferrari más relevantes. Lanzado en 2013 como sucesor del Enzo, el modelo LaFerrari representó la cima tecnológica de la marca en ese momento, tanto por su rendimiento como por su exclusividad. Su mecánica combina un V12 atmosférico de 6.3 litros con una unidad eléctrica integrada en un sistema KERS que aporta 163 CV adicionales. En conjunto alcanza los 963 CV y 900 Nm, permitiéndole acelerar de 0 a 100 km/h en 2,8 segundos y tocar los 350 km/h de velocidad máxima.

Puesto 18: Bugatti EB110 SS (351 Km/h)

Antes de ser adquirida por el Grupo Volkswagen, Bugatti (que por entonces tenía sede en Italia) sorprendía al mundo con el EB110, un modelo avanzado a su tiempo. Con su versión Super Sport, lanzada en 1992, introdujo un motor V12 de 3.5 litros con cuatro turbocompresores, 611 CV y una construcción ligera basada en materiales poco frecuentes en su época como el aluminio, el titanio y la fibra de carbono. Con apenas 1418 kg de peso, alcanzó los 351 km/h, consolidándose como un pionero del concepto hypercar.

Puesto 17: Pagani Huayra BC (388 km/h)

El siguiente modelo el la lista tiene una mayor cercanía con la Argentina. La exclusividad y el arte del detalle definen a la marca de Horacio Pagani y el Huayra BC —lanzado en 2016 y limitado a solo 20 unidades— no es la excepción. Su motor V12 biturbo de 6.0 litros, desarrollado por Mercedes AMG, entrega 790 CV y 1098 Nm, cifra que asciende a 827 CV y 1100 Nm en la versión Pacchetto Tempesta. Con mejoras aerodinámicas notables respecto a su estándar, el BC alcanza los 388 km/h, aunque uno de sus prototipos habría llegado a 414 km/h sin limitaciones electrónicas.

Puesto 16: McLaren F1 (391 km/h)

Diseñado por Gordon Murray y lanzado en 1992, el McLaren F1 fue durante años el auto más rápido del mundo. Su receta fue tan simple como efectiva: peso mínimo —solo 1140 kg— y máxima eficiencia mecánica. Está equipado con un V12 atmosférico de 6.1 litros desarrollado por BMW, entregando 636 CV. En 1998, sin limitador electrónico, alcanzó los 391 km/h en la pista alemana de Ehra-Lessien, marcando un hito que lo consagró como una leyenda de la industria.

Puesto 15: Koenigsegg CCR (395 km/h)

Antes del auge de Bugatti y Pagani, Koenigsegg (fabricante de automóviles superdeportivos de lujo cuya sede central se ubica en Ängelholm, Suecia) marcaba el paso entre los superdeportivos. El CCR, presentado en 2004, alcanzó los 395 km/h en la pista de Nardò en 2005, con un V8 de 4.7 litros que desarrollaba 816 CV. Fue el primer vehículo de producción en acercarse seriamente a los 400 km/h en la era moderna, aunque su reinado fue breve.

Puesto 14: Saleen S7 Twin Turbo (399 km/h)

Hay un país que en esta lista no se podía quedar de brazos cruzados: Estados Unidos. De la potencia norteamericana salió el Saleen S7, lanzado a inicios del siglo XXI, que recibió en 2004 una versión con doble turbo que elevó su potencia a 760 CV gracias a un V8 de 7.0 litros desarrollado en colaboración con Ford. Con un chasis íntegramente de fibra de carbono y una aerodinámica agresiva, la versión Twin Turbo alcanzó los 399 km/h, abriendo camino a una nueva generación de deportivos norteamericanos.

Puesto 13: McLaren Speedtail (403 km/h)

Concebido como el primer “Hyper GT” de la marca británica, el McLaren Speedtail combina lujo, tecnología y prestaciones extremas. Con su diseño futurista buscó enfocarse por completo en la eficiencia aerodinámica, incluyendo ruedas delanteras carenadas (más habituales en motos) y cámaras en lugar de retrovisores. Bajo su silueta de lágrima esconde un sistema híbrido de 1050 CV que lo impulsa hasta los 403 km/h, convirtiéndolo en el McLaren más veloz jamás fabricado.

Puesto 12: Bugatti Veyron (407 km/h)

El Veyron fue el modelo que marcó el resurgimiento definitivo de Bugatti. Su ambicioso objetivo era superar los 1000 CV y romper la barrera de los 400 km/h, algo que logró en 2005 con sus 407 km/h de velocidad máxima. Su propulsor W16 de 8.0 litros con cuatro turbocompresores sentó un precedente en la industria que aún resulta impresionante.

Puesto 11: Koenigsegg Regera (410 km/h)

En 2015, Koenigsegg presentó el Regera, un hypercar híbrido que prescinde de la transmisión tradicional. Combinando un motor V8 biturbo de 5.0 litros con tres propulsores eléctricos, alcanza los 1500 CV y 2000 Nm de par. Gracias a su diseño aerodinámico y su construcción ultraligera, puede llegar a los 410 km/h y acelerar de 0 a 400 km/h en menos de 20 segundos, coronándose también como el más rápido del mundo en el 0-400-0: apenas 31,4 segundos.

Puesto 10: SSC Ultimate Aero TT (411 km/h)

En 2007, SSC North America —por entonces Shelby Super Cars— sorprendió al mundo con el Ultimate Aero TT, un superdeportivo que desplazó al Bugatti Veyron como el auto más rápido del planeta. Dotado de un motor V8 biturbo de 1199 CV y 1302 Nm, logró una media de 411 km/h en una prueba oficial, avalada por Guinness World Records.

Puesto 9: Rimac Nevera (412 km/h)

Hasta mediados de 2024, fue el coche eléctrico más veloz del mundo. El Rimac Nevera, evolución del prototipo C-Two, alcanzó los 412 km/h durante una prueba realizada en la pista de Automotive Testing Papenburg, en Alemania. Con 1914 CV y 2360 Nm, su rendimiento no envidia a los nafteros. La versión de producción está limitada electrónicamente a 350 km/h, aunque en ciertos eventos, la marca permite liberar todo su potencial. Ostenta el récord del cuarto de milla para autos de producción: 8,74 segundos a 266 km/h.

Puesto 8: Bugatti Chiron (420 km/h)

Lanzado en 2016, el Chiron fue la evolución natural del Veyron, manteniendo el imponente motor W16 de 8.0 litros, ahora llevado a 1500 CV. Capaz de alcanzar los 420 km/h en su versión estándar, marcó una nueva vara en el segmento de los hypercars. Su diseño conservó la esencia de su antecesor, pero con un enfoque más moderno y refinado. A lo largo de los años, Bugatti ha lanzado variantes aún más radicales bajo la misma denominación.

Puesto 7: Bugatti Veyron Super Sport (430,98 km/h)

En 2010, Bugatti decidió superar su propia marca con una versión potenciada y más aerodinámica del Veyron. El Veyron Super Sport, con 1200 CV, alcanzó los 430,98 km/h, cifra reconocida oficialmente por Guinness. Sin embargo, la marca fue retirada posteriormente debido a que los modelos entregados al público incluían un limitador que los mantenía por debajo de los 415 km/h, con el fin de preservar la integridad de los neumáticos.

Puesto 6: Hennessey Venom GT (435 km/h)

Fabricado por el preparador estadounidense Hennessey Performance, el Venom GT sorprendió en 2014 al registrar 435 km/h en el Kennedy Space Center. Basado en la plataforma de un Lotus Exige, aunque con grandes modificaciones, estaba impulsado por un V8 biturbo de 6.2 litros con 1244 CV. Su récord fue avalado por Guinness y supuso un golpe directo al liderazgo de Bugatti. Actualmente, su sucesor, el Venom F5, busca replicar la hazaña.

Puesto 5: Hennessey Venom F5 (435 km/h —provisional—)

El Venom F5 representa la ambición definitiva de Hennessey: superar la mítica barrera de las 300 millas por hora (482 km/h). Hasta el momento ha igualado la marca de su predecesor con una velocidad verificada de 435 km/h, durante una prueba en Florida. Su motor V8 “Fury” de 6.6 litros biturbo genera 1842 CV. Si logra alcanzar los prometidos 500 km/h, se convertirá en el auto más rápido jamás fabricado.

Puesto 4: Aspark Owl SP600 (438,7 km/h)

En junio de 2024, el Aspark Owl SP600 (una evolución del exótico Owl fabricado por M.A.T. en Italia y desarrollado por la firma japonesa Aspark) se convirtió en el auto eléctrico más rápido del mundo. Alcanzó los 438,7 km/h en la pista de Papenburg, aunque lo hizo en versión preproducción, sin retrovisores laterales y con neumáticos Bridgestone Potenza Race hechos a medida.

Puesto 3: Koenigsegg Agera RS (447,2 km/h)

El Agera RS logró en 2017 marcar una media de 447,2 km/h en una carretera cerrada en Nevada, Estados Unidos. Su motor V8 de 5.0 litros biturbo desarrolla 1160 CV. Además del récord de velocidad, también logró un impresionante 0-400-0 km/h en apenas 36,44 segundos.

Puesto 2: SSC Tuatara (460,43 km/h)

El último exponente de SSC North America logró en 2021 el Récord Guinness al auto más rápido del mundo con una velocidad promedio de 455,28 km/h, alcanzando un pico de 460,43 km/h. Este registro fue realizado en dos pasadas en sentido opuesto, siguiendo el protocolo oficial. Su motor V8 biturbo rinde 1250 CV con combustible convencional y hasta 1750 CV utilizando E85. Un modelo envuelto en cierta controversia por intentos previos fallidos, pero que finalmente se consagró con una marca verificable.

Puesto 1: Bugatti Chiron Super Sport 300+ (490,48 km/h)

En 2019, Bugatti volvió a hacer historia al superar la barrera de los 300 mph (482,8 km/h) con el Chiron Super Sport 300+, una edición limitada del Chiron con mejoras aerodinámicas y 1600 CV de potencia. En una prueba realizada en la pista de Ehra-Lessien (Alemania) alcanzó los 490,48 km/h.

Aunque esta marca no fue certificada por Guinness —ya que la prueba fue en un solo sentido y con un prototipo levemente distinto al modelo de producción—, sigue siendo la velocidad más alta alcanzada por un auto de producción hasta la fecha. Solo se fabricaron 30 unidades, con una velocidad limitada a 440 km/h por razones de seguridad.

Existe un rincón exclusivo de la industria automotriz destinado para los vehículos que parecen salidos directamente de una pista de carreras. Modelos poco prácticos para la vida cotidiana y que llegan a ofrecer algo distinto a lo que el consumidor habitual está acostumbrado.

No son soluciones de movilidad o para el confort, sino que buscan ser una experiencia en sí mismos. Se trata de deportivos extremos que pueden superar los 400 km/h y, en algunos casos, se acercan a los 500 km/h. Pura ingeniería de precisión, potencia y diseño, reservados para algunas pocas billeteras en el mundo.

Desde hace décadas, los fabricantes de estos superdeportivos compiten por alcanzar un objetivo común: ser los más rápidos del planeta. Lejos de la gran mayoría de las rutas convencionales, por donde no pueden circular como consecuencia de sus disposiciones técnicas, estos modelos representan un símbolo de estatus y la simple oportunidad de encenderlos ya se trata de una vivencia particular.

Aunque su velocidad máxima rara vez se alcanza fuera de un circuito, el dato no deja de ser un argumento central para posicionarlos en la cima del mercado. En los últimos años, la evolución tecnológica ha permitido romper marcas históricas: hoy, superar los 400 km/h ya no es una rareza. La nueva frontera parece estar en los 500 km/h, una cifra impensada hace apenas una década. A continuación, un recorrido por los 20 autos más veloces del mundo, según el medio especializado Car and Driver:

Puesto 20: McLaren P1 (350 km/h)

Tras el legendario McLaren F1, la casa de Woking (Inglaterra) no había vuelto a incursionar en un modelo tan ambicioso. Presentado en 2013, está equipado con un sistema híbrido compuesto por un motor V8 biturbo de 3.8 litros y una unidad eléctrica, que entrega una potencia combinada de 916 CV y 900 Nm de par.

Todo ello en una carrocería de apenas 1395 kilos gracias al uso intensivo de fibra de carbono. Incorpora, además, tecnologías heredadas de la Fórmula 1, como el sistema KERS para liberar potencia adicional y un alerón trasero con función DRS. Su velocidad máxima, limitada electrónicamente, alcanza los 350 km/h.

Puesto 19: LaFerrari (350 km/h)

El primer híbrido en la historia de Maranello fue también uno de los Ferrari más relevantes. Lanzado en 2013 como sucesor del Enzo, el modelo LaFerrari representó la cima tecnológica de la marca en ese momento, tanto por su rendimiento como por su exclusividad. Su mecánica combina un V12 atmosférico de 6.3 litros con una unidad eléctrica integrada en un sistema KERS que aporta 163 CV adicionales. En conjunto alcanza los 963 CV y 900 Nm, permitiéndole acelerar de 0 a 100 km/h en 2,8 segundos y tocar los 350 km/h de velocidad máxima.

Puesto 18: Bugatti EB110 SS (351 Km/h)

Antes de ser adquirida por el Grupo Volkswagen, Bugatti (que por entonces tenía sede en Italia) sorprendía al mundo con el EB110, un modelo avanzado a su tiempo. Con su versión Super Sport, lanzada en 1992, introdujo un motor V12 de 3.5 litros con cuatro turbocompresores, 611 CV y una construcción ligera basada en materiales poco frecuentes en su época como el aluminio, el titanio y la fibra de carbono. Con apenas 1418 kg de peso, alcanzó los 351 km/h, consolidándose como un pionero del concepto hypercar.

Puesto 17: Pagani Huayra BC (388 km/h)

El siguiente modelo el la lista tiene una mayor cercanía con la Argentina. La exclusividad y el arte del detalle definen a la marca de Horacio Pagani y el Huayra BC —lanzado en 2016 y limitado a solo 20 unidades— no es la excepción. Su motor V12 biturbo de 6.0 litros, desarrollado por Mercedes AMG, entrega 790 CV y 1098 Nm, cifra que asciende a 827 CV y 1100 Nm en la versión Pacchetto Tempesta. Con mejoras aerodinámicas notables respecto a su estándar, el BC alcanza los 388 km/h, aunque uno de sus prototipos habría llegado a 414 km/h sin limitaciones electrónicas.

Puesto 16: McLaren F1 (391 km/h)

Diseñado por Gordon Murray y lanzado en 1992, el McLaren F1 fue durante años el auto más rápido del mundo. Su receta fue tan simple como efectiva: peso mínimo —solo 1140 kg— y máxima eficiencia mecánica. Está equipado con un V12 atmosférico de 6.1 litros desarrollado por BMW, entregando 636 CV. En 1998, sin limitador electrónico, alcanzó los 391 km/h en la pista alemana de Ehra-Lessien, marcando un hito que lo consagró como una leyenda de la industria.

Puesto 15: Koenigsegg CCR (395 km/h)

Antes del auge de Bugatti y Pagani, Koenigsegg (fabricante de automóviles superdeportivos de lujo cuya sede central se ubica en Ängelholm, Suecia) marcaba el paso entre los superdeportivos. El CCR, presentado en 2004, alcanzó los 395 km/h en la pista de Nardò en 2005, con un V8 de 4.7 litros que desarrollaba 816 CV. Fue el primer vehículo de producción en acercarse seriamente a los 400 km/h en la era moderna, aunque su reinado fue breve.

Puesto 14: Saleen S7 Twin Turbo (399 km/h)

Hay un país que en esta lista no se podía quedar de brazos cruzados: Estados Unidos. De la potencia norteamericana salió el Saleen S7, lanzado a inicios del siglo XXI, que recibió en 2004 una versión con doble turbo que elevó su potencia a 760 CV gracias a un V8 de 7.0 litros desarrollado en colaboración con Ford. Con un chasis íntegramente de fibra de carbono y una aerodinámica agresiva, la versión Twin Turbo alcanzó los 399 km/h, abriendo camino a una nueva generación de deportivos norteamericanos.

Puesto 13: McLaren Speedtail (403 km/h)

Concebido como el primer “Hyper GT” de la marca británica, el McLaren Speedtail combina lujo, tecnología y prestaciones extremas. Con su diseño futurista buscó enfocarse por completo en la eficiencia aerodinámica, incluyendo ruedas delanteras carenadas (más habituales en motos) y cámaras en lugar de retrovisores. Bajo su silueta de lágrima esconde un sistema híbrido de 1050 CV que lo impulsa hasta los 403 km/h, convirtiéndolo en el McLaren más veloz jamás fabricado.

Puesto 12: Bugatti Veyron (407 km/h)

El Veyron fue el modelo que marcó el resurgimiento definitivo de Bugatti. Su ambicioso objetivo era superar los 1000 CV y romper la barrera de los 400 km/h, algo que logró en 2005 con sus 407 km/h de velocidad máxima. Su propulsor W16 de 8.0 litros con cuatro turbocompresores sentó un precedente en la industria que aún resulta impresionante.

Puesto 11: Koenigsegg Regera (410 km/h)

En 2015, Koenigsegg presentó el Regera, un hypercar híbrido que prescinde de la transmisión tradicional. Combinando un motor V8 biturbo de 5.0 litros con tres propulsores eléctricos, alcanza los 1500 CV y 2000 Nm de par. Gracias a su diseño aerodinámico y su construcción ultraligera, puede llegar a los 410 km/h y acelerar de 0 a 400 km/h en menos de 20 segundos, coronándose también como el más rápido del mundo en el 0-400-0: apenas 31,4 segundos.

Puesto 10: SSC Ultimate Aero TT (411 km/h)

En 2007, SSC North America —por entonces Shelby Super Cars— sorprendió al mundo con el Ultimate Aero TT, un superdeportivo que desplazó al Bugatti Veyron como el auto más rápido del planeta. Dotado de un motor V8 biturbo de 1199 CV y 1302 Nm, logró una media de 411 km/h en una prueba oficial, avalada por Guinness World Records.

Puesto 9: Rimac Nevera (412 km/h)

Hasta mediados de 2024, fue el coche eléctrico más veloz del mundo. El Rimac Nevera, evolución del prototipo C-Two, alcanzó los 412 km/h durante una prueba realizada en la pista de Automotive Testing Papenburg, en Alemania. Con 1914 CV y 2360 Nm, su rendimiento no envidia a los nafteros. La versión de producción está limitada electrónicamente a 350 km/h, aunque en ciertos eventos, la marca permite liberar todo su potencial. Ostenta el récord del cuarto de milla para autos de producción: 8,74 segundos a 266 km/h.

Puesto 8: Bugatti Chiron (420 km/h)

Lanzado en 2016, el Chiron fue la evolución natural del Veyron, manteniendo el imponente motor W16 de 8.0 litros, ahora llevado a 1500 CV. Capaz de alcanzar los 420 km/h en su versión estándar, marcó una nueva vara en el segmento de los hypercars. Su diseño conservó la esencia de su antecesor, pero con un enfoque más moderno y refinado. A lo largo de los años, Bugatti ha lanzado variantes aún más radicales bajo la misma denominación.

Puesto 7: Bugatti Veyron Super Sport (430,98 km/h)

En 2010, Bugatti decidió superar su propia marca con una versión potenciada y más aerodinámica del Veyron. El Veyron Super Sport, con 1200 CV, alcanzó los 430,98 km/h, cifra reconocida oficialmente por Guinness. Sin embargo, la marca fue retirada posteriormente debido a que los modelos entregados al público incluían un limitador que los mantenía por debajo de los 415 km/h, con el fin de preservar la integridad de los neumáticos.

Puesto 6: Hennessey Venom GT (435 km/h)

Fabricado por el preparador estadounidense Hennessey Performance, el Venom GT sorprendió en 2014 al registrar 435 km/h en el Kennedy Space Center. Basado en la plataforma de un Lotus Exige, aunque con grandes modificaciones, estaba impulsado por un V8 biturbo de 6.2 litros con 1244 CV. Su récord fue avalado por Guinness y supuso un golpe directo al liderazgo de Bugatti. Actualmente, su sucesor, el Venom F5, busca replicar la hazaña.

Puesto 5: Hennessey Venom F5 (435 km/h —provisional—)

El Venom F5 representa la ambición definitiva de Hennessey: superar la mítica barrera de las 300 millas por hora (482 km/h). Hasta el momento ha igualado la marca de su predecesor con una velocidad verificada de 435 km/h, durante una prueba en Florida. Su motor V8 “Fury” de 6.6 litros biturbo genera 1842 CV. Si logra alcanzar los prometidos 500 km/h, se convertirá en el auto más rápido jamás fabricado.

Puesto 4: Aspark Owl SP600 (438,7 km/h)

En junio de 2024, el Aspark Owl SP600 (una evolución del exótico Owl fabricado por M.A.T. en Italia y desarrollado por la firma japonesa Aspark) se convirtió en el auto eléctrico más rápido del mundo. Alcanzó los 438,7 km/h en la pista de Papenburg, aunque lo hizo en versión preproducción, sin retrovisores laterales y con neumáticos Bridgestone Potenza Race hechos a medida.

Puesto 3: Koenigsegg Agera RS (447,2 km/h)

El Agera RS logró en 2017 marcar una media de 447,2 km/h en una carretera cerrada en Nevada, Estados Unidos. Su motor V8 de 5.0 litros biturbo desarrolla 1160 CV. Además del récord de velocidad, también logró un impresionante 0-400-0 km/h en apenas 36,44 segundos.

Puesto 2: SSC Tuatara (460,43 km/h)

El último exponente de SSC North America logró en 2021 el Récord Guinness al auto más rápido del mundo con una velocidad promedio de 455,28 km/h, alcanzando un pico de 460,43 km/h. Este registro fue realizado en dos pasadas en sentido opuesto, siguiendo el protocolo oficial. Su motor V8 biturbo rinde 1250 CV con combustible convencional y hasta 1750 CV utilizando E85. Un modelo envuelto en cierta controversia por intentos previos fallidos, pero que finalmente se consagró con una marca verificable.

Puesto 1: Bugatti Chiron Super Sport 300+ (490,48 km/h)

En 2019, Bugatti volvió a hacer historia al superar la barrera de los 300 mph (482,8 km/h) con el Chiron Super Sport 300+, una edición limitada del Chiron con mejoras aerodinámicas y 1600 CV de potencia. En una prueba realizada en la pista de Ehra-Lessien (Alemania) alcanzó los 490,48 km/h.

Aunque esta marca no fue certificada por Guinness —ya que la prueba fue en un solo sentido y con un prototipo levemente distinto al modelo de producción—, sigue siendo la velocidad más alta alcanzada por un auto de producción hasta la fecha. Solo se fabricaron 30 unidades, con una velocidad limitada a 440 km/h por razones de seguridad.

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