Trump anunció que Estados Unidos atacó Irán: bombardeó tres instalaciones nucleares

WASHINGTON.— En una de las decisiones más trascendentales de su segundo mandato, que podría reconfigurar los equilibrios de Medio Oriente, el presidente Donald Trump anunció este sábado que las fuerzas norteamericanas atacaron tres instalaciones nucleares en Irán, sumándose en forma directa a la ofensiva de su aliado Israel para desmantelar el programa nuclear del régimen de los ayatollahs.
“Las principales instalaciones de enriquecimiento nuclear de Irán han sido total y completamente destruidas”, dijo esta noche en un mensaje a la nación, en el que además amenazó al régimen con “ataques peores” si no acepta hacer la paz y cesa sus acciones agresivas.
“El Ejército estadounidense llevó a cabo ataques masivos de precisión contra las tres instalaciones nucleares clave del régimen iraní en Fordo, Natanz e Isfahan. Todo el mundo escuchó esos nombres durante años mientras construían esta bomba horriblemente destructiva. Nuestro objetivo era la destrucción de la capacidad de enriquecimiento nuclear de Irán y poner fin a la amenaza nuclear planteada por el Estado patrocinador del terror número uno del mundo”, amplió Trump, secundado por el vicepresidente, JD Vance; el secretario de Estado, Marco Rubio, y el jefe del Pentágono, Pete Hegseth.
President Trump warns that the U.S. could again bomb Iran:
“If peace does not come quickly, we will go after those other targets with precision, speed, and skill.” pic.twitter.com/Ri7Kud1AvC
— The Recount (@therecount) June 22, 2025
“Esta noche puedo informar al mundo de que los ataques han sido un éxito militar espectacular, las principales instalaciones de enriquecimiento nuclear de Irán han sido completa y totalmente destruidas”, afirmó, y lanzó una amenaza al régimen islámico. “Si la paz no llega pronto, perseguiremos esos otros objetivos con precisión, velocidad y habilidad”, dijo. “Los futuros ataques serán mucho mayores y mucho más fáciles”.
El anuncio había llegado poco más de dos horas antes, con un posteo en su red Truth Social a las 19.50 (hora de Washington), un mensaje que generó inmediata repercusión global. “Hemos completado nuestro exitoso ataque a los tres sitios nucleares en Irán, incluyendo Fordo, Natanz y Isfahan. Todos los aviones están ahora fuera del espacio aéreo iraní. Una carga completa de bombas fue lanzada en el sitio principal, Fordo. Todos los aviones están a salvo en su camino a casa. Felicitaciones a nuestros grandes guerreros norteamericanos. No hay otro ejército en el mundo que podría haber hecho esto. ¡Ahora es el tiempo de la paz!“, escribió.
Donald J. Trump Truth Social 06.21.25 07:46 PM EST pic.twitter.com/M025vmNZq6
— Commentary Donald J. Trump Posts From Truth Social (@TrumpDailyPosts) June 21, 2025
La decisión del mandatario es una arriesgada estrategia para debilitar a un antiguo enemigo ante la amenaza de represalias de Teherán, que podría desatar un conflicto regional más amplio luego del intercambio de ataques entre Israel e Irán desde el 13 de junio pasado.
En un segundo mensaje, Trump anunció que pronunciaría un discurso a la nación esta noche, a las 22 (hora local, las 23 en la Argentina), en relación con la “muy exitosa operación militar en Irán”.
Donald J. Trump Truth Social 06.21.25 08:13 PM EST pic.twitter.com/aUbNoHRp42
— Commentary Donald J. Trump Posts From Truth Social (@TrumpDailyPosts) June 22, 2025
“Este es un momento histórico para Estados Unidos, Israel y el mundo. Irán debe ahora aceptar poner fin a esta guerra. Gracias”, escribió en su red social. Luego publicó otro mensaje solo con un posteo de la bandera estadounidense.
En un diálogo con la agencia Reuters antes de su mensaje a la nación, el presidente dijo que “esta noche fue un éxito increíble” y que Irán “debe detenerse de inmediato, ya que en caso contrario serán atacados de nuevo”.
Trump -que tras el ataque habló con Netanyahu- no brindó detalles acerca de cuán dañadas habrían resultado las instalaciones nucleares iraníes tras los bombardeos norteamericanos, y tampoco especificó qué tipo de bombas fueron empleadas.
Según publicó el diario The New York Times, un funcionario del Departamento de Defensa dijo bajo condición de anonimato que se utilizaron varios bombarderos B-2 para atacar Fordo. No quedó claro de inmediato si se utilizaron otros aviones de guerra estadounidenses en los ataques. Otro funcionario afirmó que múltiples bombas anti-búnker fueron lanzadas sobre Fordo, y que las evaluaciones iniciales de los daños indicaron que la instalación había sido “sacada de la mesa”.
Funcionarios estadounidenses e israelíes habían afirmado que los bombarderos B2 de Estados Unidos y una bomba anti-búnker de 13.600 kilos, que solo ellos podían portar, ofrecían la mejor oportunidad de destruir emplazamientos fuertemente fortificados, vinculados al programa nuclear iraní y enterrados a gran profundidad.
En los primeros reportes tras el ataque, la prensa iraní informó que parte del sitio nuclear Fordo fue “atacado por bombardeos enemigos”.
“Hace horas, después de que se activaran las defensas aéreas de Qom y se identificaran objetivos hostiles, parte de las instalaciones nucleares de Fordo fue atacada por la aviación enemiga”, declaró Morteza Heydari, vocero del Cuartel General Provincial de Gestión de Crisis de Qom, según una traducción de Al-Jazeera. Además, un funcionario iraní citado por la agencia IRNA dijo que los sitios nucleares atacados por Estados Unidos no contienen materiales que causen radiación.
Fordo es uno de los dos centros de enriquecimiento de uranio de Irán, que se calcula que se encuentra a entre 80 y 90 metros bajo tierra, debajo de una montaña. Israel golpeó el lugar el primer día de sus ataques, pero no se observaron daños en ese momento, según el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), que dirige el argentino Rafael Grossi.
“Ahora la guerra comenzó”, fue la amenaza publicada en la cuenta de X asociada a la Guardia Revolucionaria iraní, mientras que uno de los líderes hutíes de Yemen, Hazam al-Assad, aseguró que “Washington enfrentará las consecuencias”.
President Trump and I often say: ‘Peace through strength.’
First comes strength, then comes peace.
And tonight, @realDonaldTrump and the United States acted with a lot of strength. pic.twitter.com/7lTWCZkgw7
— Benjamin Netanyahu – בנימין נתניהו (@netanyahu) June 22, 2025
Por su parte, Netanyahu publicó un video grabado en su cuenta en X en el que dio un fuerte mensaje de respaldo a la acción norteamericana. “El presidente Trump y yo solemos decir: ‘Paz a través de la fuerza’. Primero viene la fuerza, luego viene la paz.Y esta noche, Trump y Estados Unidos actuaron con mucha fuerza”, señaló.
“Su audaz decisión de atacar las instalaciones nucleares de Irán con el impresionante y justo poder de Estados Unidos cambiará la historia. Con la acción de esta noche contra las instalaciones nucleares de Irán, Estados Unidos ha sido verdaderamente insuperable. Ha hecho lo que ningún otro país de la Tierra podría hacer“, continuó.
“La historia registrará que Trump actuó para negar al régimen más peligroso del mundo las armas más peligrosas del mundo. Su liderazgo hoy ha creado un pivote de la historia que puede ayudar a conducir a Medio Oriente y más allá a un futuro de prosperidad y paz”, añadió Netanyahu.
Movimiento de bombarderos
Más temprano se había informado que Estados Unidos había trasladado bombarderos B-2 desde la base aérea Whiteman, en Misuri, a la isla de Guam, en el Pacífico. Los B-2 tienen la capacidad única de transportar la bomba estadounidense más pesada, el Penetrador de Artillería Masiva (Massive Ordnance Penetrator) llamado GBU-57 -coloquialmente, “bombas anti-búnker”-, diseñada para destruir objetivos a gran profundidad. Es la única arma que, según los expertos, podría utilizarse para atacar la inaccesible instalación nuclear subterránea iraní de Fordo.
La intervención directa de Estados Unidos -que ya venía prestando asistencia militar a Israel- amenaza con ampliar un conflicto a niveles impredecibles. Trump había prometido en su campaña del año pasado que lo llevó de regreso a la Casa Blanca mantener a Estados Unidos fuera de conflictos en el extranjero.
Irán amenazó con atacar a las tropas estadounidenses de la región en caso de que Estados Unidos interviniera en el conflicto, y los Estados del Golfo, ricos en petróleo y gas, que albergan bases estadounidenses temen que la violencia se extienda a sus territorios.
El miércoles pasado, el líder supremo iraní, el ayatollah Ali Khamenei, había afirmado que su país no se rendiría y advirtió de que cualquier intervención militar estadounidense acarrearía consecuencias irreparables.
Un día más tarde, en medio de la expectativa global por el suspenso que le había impreso Trump a una posible intervención directa de Estados Unidos, la Casa Blanca informó que el presidente norteamericano tomaría una decisión en un plazo máximo de dos semanas a raíz de la “posibilidad sustancial de negociaciones” con el régimen iraní. Occidente teme que su plan nuclear esté cerca de concretar la fabricación de armas atómicas.
“Basándome en el hecho de que hay una posibilidad sustancial de negociaciones que pueden o no tener lugar con Irán en un futuro próximo, tomaré mi decisión de ir o no en las próximas dos semanas”, expresó Trump en un mensaje citado por la secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, en una conferencia de prensa. La decisión del bombardeo llegó mucho más rápido de lo que se presumía. Horas antes del anuncio en Truth Social, Trump se había vuelto a juntar con sus asesores del Consejo de Seguridad Nacional.
El director de la CIA, John Ratcliffe, se unió a otros funcionarios, entre ellos el asesor de Seguridad Nacional interino y secretario de Estado, Marco Rubio, en la Casa Blanca, donde entraron en la Sala de Crisis para monitorear los ataques y sus consecuencias, dijeron funcionarios al tanto de la situación. Ratcliffe, que tuvo un protagonismo central en los últimos días, había estado informando al presidente regularmente esta semana sobre el programa nuclear iraní.
El jueves, Leavitt había confirmado que el enviado especial norteamericano para Medio Oriente, Steve Witkoff, mantuvo contactos con autoridades iraníes, lo que en ese momento reforzó las versiones sobre un canal diplomático aún abierto a pesar de la dramática escalada bélica entre Tel Aviv y Teherán.
Inmediatamente después del ataque de este sábado, varios republicanos emitieron declaraciones de apoyo. El representante Rick Crawford, de Arkansas y presidente del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, elogió la ofensiva. “Estuve en contacto con la Casa Blanca antes de esta acción y continuaré siguiendo de cerca los acontecimientos con ellos en los próximos días”, dijo Crawford en un comunicado.
En tanto, algunos miembros del Congreso criticaron a la administración Trump por no buscar la aprobación del Congreso antes de que Estados Unidos se involucrara en los ataques contra Irán. “Esto no es constitucional”, dijo el representante Thomas Massie, republicano de Kentucky, quien copatrocinó una resolución que intentaba bloquear cualquier acción militar en Irán sin que el Congreso la autorizara.
El congresista demócrata Jim Himes, de Connecticut, que integra el Comité de Inteligencia, dijo: “De acuerdo con la Constitución que ambos hemos jurado defender, mi atención a este asunto viene antes de que caigan las bombas. Y punto”.
Yoav Gallant, exministro de Defensa de Israel, dijo en un posteo en redes sociales que Trump había tomado una “decisión audaz para Estados Unidos, para Israel, para toda la humanidad”.
La noche del ataque estadounidense, el ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Abbas Araghchi, se encontraba en Turquía, donde se reunió con el presidente Recep Tayyip Erdogan y tenía previsto comparecer en una conferencia de prensa el domingo. “Si Estados Unidos entra en la guerra, la situación se volverá muy, muy peligrosa”, dijo antes, durante la tarde.
Por otra parte, esta noche aviones de combate israelíes alcanzaron a tres cazas F-14 iraníes en un nuevo ataque, informó un vocero militar israelí, el general de brigada Effie Defrin. “Las capacidades de lanzamiento de misiles del régimen iraní son sólo una fracción de lo que eran al comienzo de la operación”, afirmó Defrin.
WASHINGTON.— En una de las decisiones más trascendentales de su segundo mandato, que podría reconfigurar los equilibrios de Medio Oriente, el presidente Donald Trump anunció este sábado que las fuerzas norteamericanas atacaron tres instalaciones nucleares en Irán, sumándose en forma directa a la ofensiva de su aliado Israel para desmantelar el programa nuclear del régimen de los ayatollahs.
“Las principales instalaciones de enriquecimiento nuclear de Irán han sido total y completamente destruidas”, dijo esta noche en un mensaje a la nación, en el que además amenazó al régimen con “ataques peores” si no acepta hacer la paz y cesa sus acciones agresivas.
“El Ejército estadounidense llevó a cabo ataques masivos de precisión contra las tres instalaciones nucleares clave del régimen iraní en Fordo, Natanz e Isfahan. Todo el mundo escuchó esos nombres durante años mientras construían esta bomba horriblemente destructiva. Nuestro objetivo era la destrucción de la capacidad de enriquecimiento nuclear de Irán y poner fin a la amenaza nuclear planteada por el Estado patrocinador del terror número uno del mundo”, amplió Trump, secundado por el vicepresidente, JD Vance; el secretario de Estado, Marco Rubio, y el jefe del Pentágono, Pete Hegseth.
President Trump warns that the U.S. could again bomb Iran:
“If peace does not come quickly, we will go after those other targets with precision, speed, and skill.” pic.twitter.com/Ri7Kud1AvC
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“Esta noche puedo informar al mundo de que los ataques han sido un éxito militar espectacular, las principales instalaciones de enriquecimiento nuclear de Irán han sido completa y totalmente destruidas”, afirmó, y lanzó una amenaza al régimen islámico. “Si la paz no llega pronto, perseguiremos esos otros objetivos con precisión, velocidad y habilidad”, dijo. “Los futuros ataques serán mucho mayores y mucho más fáciles”.
El anuncio había llegado poco más de dos horas antes, con un posteo en su red Truth Social a las 19.50 (hora de Washington), un mensaje que generó inmediata repercusión global. “Hemos completado nuestro exitoso ataque a los tres sitios nucleares en Irán, incluyendo Fordo, Natanz y Isfahan. Todos los aviones están ahora fuera del espacio aéreo iraní. Una carga completa de bombas fue lanzada en el sitio principal, Fordo. Todos los aviones están a salvo en su camino a casa. Felicitaciones a nuestros grandes guerreros norteamericanos. No hay otro ejército en el mundo que podría haber hecho esto. ¡Ahora es el tiempo de la paz!“, escribió.
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La decisión del mandatario es una arriesgada estrategia para debilitar a un antiguo enemigo ante la amenaza de represalias de Teherán, que podría desatar un conflicto regional más amplio luego del intercambio de ataques entre Israel e Irán desde el 13 de junio pasado.
En un segundo mensaje, Trump anunció que pronunciaría un discurso a la nación esta noche, a las 22 (hora local, las 23 en la Argentina), en relación con la “muy exitosa operación militar en Irán”.
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“Este es un momento histórico para Estados Unidos, Israel y el mundo. Irán debe ahora aceptar poner fin a esta guerra. Gracias”, escribió en su red social. Luego publicó otro mensaje solo con un posteo de la bandera estadounidense.
En un diálogo con la agencia Reuters antes de su mensaje a la nación, el presidente dijo que “esta noche fue un éxito increíble” y que Irán “debe detenerse de inmediato, ya que en caso contrario serán atacados de nuevo”.
Trump -que tras el ataque habló con Netanyahu- no brindó detalles acerca de cuán dañadas habrían resultado las instalaciones nucleares iraníes tras los bombardeos norteamericanos, y tampoco especificó qué tipo de bombas fueron empleadas.
Según publicó el diario The New York Times, un funcionario del Departamento de Defensa dijo bajo condición de anonimato que se utilizaron varios bombarderos B-2 para atacar Fordo. No quedó claro de inmediato si se utilizaron otros aviones de guerra estadounidenses en los ataques. Otro funcionario afirmó que múltiples bombas anti-búnker fueron lanzadas sobre Fordo, y que las evaluaciones iniciales de los daños indicaron que la instalación había sido “sacada de la mesa”.
Funcionarios estadounidenses e israelíes habían afirmado que los bombarderos B2 de Estados Unidos y una bomba anti-búnker de 13.600 kilos, que solo ellos podían portar, ofrecían la mejor oportunidad de destruir emplazamientos fuertemente fortificados, vinculados al programa nuclear iraní y enterrados a gran profundidad.
En los primeros reportes tras el ataque, la prensa iraní informó que parte del sitio nuclear Fordo fue “atacado por bombardeos enemigos”.
“Hace horas, después de que se activaran las defensas aéreas de Qom y se identificaran objetivos hostiles, parte de las instalaciones nucleares de Fordo fue atacada por la aviación enemiga”, declaró Morteza Heydari, vocero del Cuartel General Provincial de Gestión de Crisis de Qom, según una traducción de Al-Jazeera. Además, un funcionario iraní citado por la agencia IRNA dijo que los sitios nucleares atacados por Estados Unidos no contienen materiales que causen radiación.
Fordo es uno de los dos centros de enriquecimiento de uranio de Irán, que se calcula que se encuentra a entre 80 y 90 metros bajo tierra, debajo de una montaña. Israel golpeó el lugar el primer día de sus ataques, pero no se observaron daños en ese momento, según el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), que dirige el argentino Rafael Grossi.
“Ahora la guerra comenzó”, fue la amenaza publicada en la cuenta de X asociada a la Guardia Revolucionaria iraní, mientras que uno de los líderes hutíes de Yemen, Hazam al-Assad, aseguró que “Washington enfrentará las consecuencias”.
President Trump and I often say: ‘Peace through strength.’
First comes strength, then comes peace.
And tonight, @realDonaldTrump and the United States acted with a lot of strength. pic.twitter.com/7lTWCZkgw7
— Benjamin Netanyahu – בנימין נתניהו (@netanyahu) June 22, 2025
Por su parte, Netanyahu publicó un video grabado en su cuenta en X en el que dio un fuerte mensaje de respaldo a la acción norteamericana. “El presidente Trump y yo solemos decir: ‘Paz a través de la fuerza’. Primero viene la fuerza, luego viene la paz.Y esta noche, Trump y Estados Unidos actuaron con mucha fuerza”, señaló.
“Su audaz decisión de atacar las instalaciones nucleares de Irán con el impresionante y justo poder de Estados Unidos cambiará la historia. Con la acción de esta noche contra las instalaciones nucleares de Irán, Estados Unidos ha sido verdaderamente insuperable. Ha hecho lo que ningún otro país de la Tierra podría hacer“, continuó.
“La historia registrará que Trump actuó para negar al régimen más peligroso del mundo las armas más peligrosas del mundo. Su liderazgo hoy ha creado un pivote de la historia que puede ayudar a conducir a Medio Oriente y más allá a un futuro de prosperidad y paz”, añadió Netanyahu.
Movimiento de bombarderos
Más temprano se había informado que Estados Unidos había trasladado bombarderos B-2 desde la base aérea Whiteman, en Misuri, a la isla de Guam, en el Pacífico. Los B-2 tienen la capacidad única de transportar la bomba estadounidense más pesada, el Penetrador de Artillería Masiva (Massive Ordnance Penetrator) llamado GBU-57 -coloquialmente, “bombas anti-búnker”-, diseñada para destruir objetivos a gran profundidad. Es la única arma que, según los expertos, podría utilizarse para atacar la inaccesible instalación nuclear subterránea iraní de Fordo.
La intervención directa de Estados Unidos -que ya venía prestando asistencia militar a Israel- amenaza con ampliar un conflicto a niveles impredecibles. Trump había prometido en su campaña del año pasado que lo llevó de regreso a la Casa Blanca mantener a Estados Unidos fuera de conflictos en el extranjero.
Irán amenazó con atacar a las tropas estadounidenses de la región en caso de que Estados Unidos interviniera en el conflicto, y los Estados del Golfo, ricos en petróleo y gas, que albergan bases estadounidenses temen que la violencia se extienda a sus territorios.
El miércoles pasado, el líder supremo iraní, el ayatollah Ali Khamenei, había afirmado que su país no se rendiría y advirtió de que cualquier intervención militar estadounidense acarrearía consecuencias irreparables.
Un día más tarde, en medio de la expectativa global por el suspenso que le había impreso Trump a una posible intervención directa de Estados Unidos, la Casa Blanca informó que el presidente norteamericano tomaría una decisión en un plazo máximo de dos semanas a raíz de la “posibilidad sustancial de negociaciones” con el régimen iraní. Occidente teme que su plan nuclear esté cerca de concretar la fabricación de armas atómicas.
“Basándome en el hecho de que hay una posibilidad sustancial de negociaciones que pueden o no tener lugar con Irán en un futuro próximo, tomaré mi decisión de ir o no en las próximas dos semanas”, expresó Trump en un mensaje citado por la secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, en una conferencia de prensa. La decisión del bombardeo llegó mucho más rápido de lo que se presumía. Horas antes del anuncio en Truth Social, Trump se había vuelto a juntar con sus asesores del Consejo de Seguridad Nacional.
El director de la CIA, John Ratcliffe, se unió a otros funcionarios, entre ellos el asesor de Seguridad Nacional interino y secretario de Estado, Marco Rubio, en la Casa Blanca, donde entraron en la Sala de Crisis para monitorear los ataques y sus consecuencias, dijeron funcionarios al tanto de la situación. Ratcliffe, que tuvo un protagonismo central en los últimos días, había estado informando al presidente regularmente esta semana sobre el programa nuclear iraní.
El jueves, Leavitt había confirmado que el enviado especial norteamericano para Medio Oriente, Steve Witkoff, mantuvo contactos con autoridades iraníes, lo que en ese momento reforzó las versiones sobre un canal diplomático aún abierto a pesar de la dramática escalada bélica entre Tel Aviv y Teherán.
Inmediatamente después del ataque de este sábado, varios republicanos emitieron declaraciones de apoyo. El representante Rick Crawford, de Arkansas y presidente del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, elogió la ofensiva. “Estuve en contacto con la Casa Blanca antes de esta acción y continuaré siguiendo de cerca los acontecimientos con ellos en los próximos días”, dijo Crawford en un comunicado.
En tanto, algunos miembros del Congreso criticaron a la administración Trump por no buscar la aprobación del Congreso antes de que Estados Unidos se involucrara en los ataques contra Irán. “Esto no es constitucional”, dijo el representante Thomas Massie, republicano de Kentucky, quien copatrocinó una resolución que intentaba bloquear cualquier acción militar en Irán sin que el Congreso la autorizara.
El congresista demócrata Jim Himes, de Connecticut, que integra el Comité de Inteligencia, dijo: “De acuerdo con la Constitución que ambos hemos jurado defender, mi atención a este asunto viene antes de que caigan las bombas. Y punto”.
Yoav Gallant, exministro de Defensa de Israel, dijo en un posteo en redes sociales que Trump había tomado una “decisión audaz para Estados Unidos, para Israel, para toda la humanidad”.
La noche del ataque estadounidense, el ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Abbas Araghchi, se encontraba en Turquía, donde se reunió con el presidente Recep Tayyip Erdogan y tenía previsto comparecer en una conferencia de prensa el domingo. “Si Estados Unidos entra en la guerra, la situación se volverá muy, muy peligrosa”, dijo antes, durante la tarde.
Por otra parte, esta noche aviones de combate israelíes alcanzaron a tres cazas F-14 iraníes en un nuevo ataque, informó un vocero militar israelí, el general de brigada Effie Defrin. “Las capacidades de lanzamiento de misiles del régimen iraní son sólo una fracción de lo que eran al comienzo de la operación”, afirmó Defrin.
Washington se sumó directamente a la ofensiva de Israel; llamó a Teherán a “aceptar poner fin a esta guerra” y lo amenazó con más ataques LA NACION